miércoles, 3 de marzo de 2010

Tentempié

Estoy por irme de viaje y le pido a mi abuela que pase por casa a darle de comer a los peces.
—¿Qué peces?
—Abue, te conté que ahora tengo una pecera...
—...
—La puse en la pieza, está al lado de la tele...
—...
Se mete mi tío, la abuela empieza a sonreír:
—¡Quiere saber qué peces son a ver si se los puede comer!
—¡Claro! ¿Para qué los querés en una pecera? ¡Son tan ricos! —dice ya en medio de la carcajada.

1 comentario:

ileana dijo...

¡Que peligro! ¿siguen estando?